W H O T H I N K S A B O U T C H O I C E ?

x f i l e s

trato de ser amable pero no me sale, 

se me hace algo que me entrampa y que feo me sabe,

yo critico y me indigno y

tan sólo profecías salen de mi boca,

castigos y gritos,  comentarios que chocan y algo de asco provocan,

y no es más que un simple desafío, frente al destino que nos toca:

el final universal de todo lo que llamamos mundo, una idea que provoca,

e intimida hasta lo más profundo, genera dudas y envidias,

algunas ingenuas y otras fugaces, como las que creen en cristos y juicios finales, 

paraísos terrenales o cocinas infernales, 

que te dejan más tostado que un wafle (a la diabla),

recuerdos ancestrales de una doctrina llena de principios morales, por no decir 

llena de vulgares barbaridades y mucho más de falsedades, 

algo más cercana a la verdad que nos venden por el cable,

mecanismos de poder para todos los habitantes 

de un planeta adormecido enteramente por tranquilizantes,

y es que las fábulas se venden y se compran como el pan caliente,

los placeres que disfruta la gente,

y que obvio, las consume y vuelve entes, los dichosos entes acéfalos,

que caminan de A a B sin preguntar por qué, sin hacer un intervalo,

tan sólo mueven los pies,

los que creen en los buenos y en los malos,

los héroes o villanos, digamos un dios vs. un monstruo satánico,

encarnizado en terrucos, violadores o tiranos, los más insanos,

los que ofrecen por teve, los horrores y las sombras,

pero nunca una noticia, por más cruda, nos asombra,

el valium o el whisky, y ni hablemos de la coca,

ni de la pastilla morada que pones en tu boca,

hacen que te olvides de todo y te dejen la voz ronca,

sin nada que decir, mucho menos maldecir, tan sólo yo me encargo de predecir,

los destinos inevitables, las cositas que se vienen, 

pero nada que ver con un desarme y mucho menos con una comida diaria,

para los que tienen hambre...

ALTERNO UNA HISTORIA, UNA HISTERIA, UN INFIERNO, UNA FERIA, UN DESORDEN,

UN ENFERMO AL BORDE, UN MOMENTO EN QUE TODO CADUQUE,

UN EXCESO FRENTE A TODO LO QUE LUCE, EN UNA REALIDAD QUE A NADA NOS CONDUCE.

y ahi vienen los seres poco comprendidos del tema,

una humanidad que se desgasta sola 

objetos vuelan por el cielo, en pleno sobrevuelo sobre una ciudad maldita,

que corrompe mentes y a la gente la incita, a la indiferencia, a la plácida conveniencia,

a la supervivencia y al sistema de compra - venta,

que me alquilo por un piso, por algunos centavos compro un hijo,

y hasta lo bautizo,

obvio no pienses que pienso en eso, la sobrepoblación me hiela los huesos,

me cansa y me satura, me da asco el sudor que nos brota,

me cansan las derrotas, y las malas bromas, la mala chacota,

las coimas y los pagos, por no decir impuestos o rentas al año,

que la moda que acomoda nuestros rostros en cajas de pandora,

y nos hace creer hermosos cuando vamos engordando llenos de modorra,

cansancio y depresión, sexo, drogas y alcohol,

o una iglesia, una ideología, todos en un rol, 

social, en una escala mayor o menor, una esquema artificial que

tan sólo provoca mucho asco frente a tanto hedor, 

las cosas se ponen densas, por eso los marcianos no nos visitan,

tan sólo nos dejan señas, pero ni siquiera nos invitan,

a gozar de las ideas universales, 

las que nos podrían librar de estos rancios sistemas sociales,

económicos, políticos y raciales,

que nos hacen cada vez más estúpidos,

y que nos hacen pensar que los animales, o peor aún las tribus que

viven en las profundidades, de una selva virgen, purita sin cavidades,

son los que viven el submundo sin desarrollo,

lavando su ropa en un arroyo, o cocinando en un hoyo,

los que siembran lo que comen sin esperar cuánto cobren,

sin tener que esperar un paraíso o una cirugía en el abdomen,

y mientras nuestras conciencias se carcomen

frente a todo lo que convertimos en un gran desorden,

por un afán de poder, sin poder contener o mantener,

una reglas simples sin tener que prevalecer, o dominar,

según nosotros los elementos o los metales,

los virus y las enfermedades, y mucho más los gobiernos y las sociedades,

el grupo de los 7 nos llena de probabilidades,

pero dentro un esquema donde son los únicos ganadores,

los que se llevan beneficios y bondades,

mientras vivimos en su orden, bajando la cabeza

y consumiendo su tristeza,

la que nos venden con mucha destreza,

con anuncios por la tele, nuestra fiel compañera...